Con papel vinílico

Tengo algunos restos de papel de empapelar paredes, procedentes de un muestrario. La verdad es que es un material muy fácil de trabajar, y más si está preencolado como éste: lo humedeces con una esponja y agua y ya lo puedes pegar donde quieras... todo un descubrimiento!

Y  aprovechando que es resistente al agua... qué tal un Recetario?? Así si se moja o se ensucia en la cocina, lo puedes lavar y secar al momento!

La estructura está hecha de cartón pluma. Hay que cortar 3 rectángulos que servirán de portada, contraportada y lomo. 

Os he apuntado las medidas de mi recetario, no es muy grande, pero suficiente para apuntar ingredientes y 4 instrucciones en cada receta.

Una vez pegados los rectángulos de cartón pluma sobre el papel vinílico, acabamos de pegar el resto de bordes hacia adentro. Si queréis cerrar el recetario con cinta, podéis aprovechar este momento para pegarla y así quedará oculta.

Aquí podéis ver un detalle de la cinta con el recetario cerrado.

La portada es muy sencilla porque el papel exterior me gusta mucho y no quería taparlo. Solamente unas letras "Receptes".

La parte interior está formada por un bolsillo a la izquierda y una libreta a la derecha. El lápiz está atado a la libreta y se puede guardar en el bolsillo para que no cuelgue.

 El bolsillo de la izquierda está montado sobre dos tiras de cartón pluma muy estrechas, así le doy volúmen.

 La libreta tiene 5 separaciones interiores hechas con papel de scrap y un detalle de cinta de papel cerrada con un ojete que permite saltar de una a otra. Cada separación lleva una pequeña etiqueta sellada con su título: entrantes, primeros, carnes, pescados y postres.

Las hojas interiores son de papel blanco reciclado y llevan un pequeño sellito cada una que cambia según el apartado.

 Bueno, ahora solamente falta empezar a llenarlo de recetas riquísimas!!!!

Ama todo lo que haces

 No creo que ninguna de las scraperas que aterrizáis por este blog se extrañe si hablo de sentir pasión por las cosas que haces... Somos de una especie diferente, disfrutamos con lo que hacemos y adoramos dedicar tiempo a lo que nos gusta.

Os voy a confesar que tengo muchas pasiones pero una de las más antiguas es la danza. Empecé a bailar con 6 años y he pasado por casi todas las disciplinas: clásico, contemporáneo, salón... y últimamente mi asignatura pendiente... claqué! Pero en el fondo de mi corazón la que adoro es el ballet clásico. Por eso mis primeras zapatillas de punta son muy especiales y después de pasar años colgadas de un hilo, literalmente, he decidido darles el sitio que se merecen.

La idea inicial es una caja de vino...

 Quería arrancar todas las separaciones interiores pero solo pude con las de la base, porque la que corresponde al cuello de las botellas está clavada desde fuera y lo único que pude hacer es girarla. Resultó ser un soporte magnífico para colgar las zapatillas!







La caja lleva una capa de gesso y está decorada con papeles. Para colgar las zapatillas usé un tornillo de encuadernación, que pude enroscar en el papel y el adorno. En este detalle lo podéis ver mejor.

Y aquí las zapatillas recién colgadas. Para colocarlas en la posición exacta van unidas con un alfiler y fijadas por la punta a la caja.

Y ahora, unos cuantos detalles...

Colgante reversible

Está hecho a partir de una arandela metálica, forrada con papel y recubierta de embossing de purpurina. ¿Cuál os gusta más, el negro o el rojo?

De boda

Inspirada por esta tarjeta de Manoli, he preparado mi versión para la boda de un primo que se casa dentro de 15 días. Solo falta ponerle el dinerito!

 

Estos papeles de graphic 45 son ideales para bodas, verdad?

Un colgante

La base de este colgante es una estrella de madera que me trajeron como recuerdo de un viaje a Israel. Lleva un recorte de este papel y un poco de embossing transparente con purpurina.

Simple, verdad?

Nuevos proyectos

Cómo pasa el tiempo! No había notado que llevaba desaparecida tantos días...La verdad es que en este tiempo ha habido unos pocos cambios en mi vida, sobretodo de tipo laboral. Afortunadamente solo han sido dos meses de paro y hace unos días que vuelvo a estar en activo con un nuevo proyecto profesional. Es duro volver a empezar desde el principio pero si miro a mi alrededor no puedo evitar sentirme afortunada. Siempre había pensado que cuando tuviese tiempo scrapearía sin parar pero ahora puedo aseguraros que no es así. Creo que me resulta más fácil sacar tiempo para mis aficiones cuando estoy ocupada que cuando tengo los días libres... Complicada, yo? Bah... solo un poco... :-D

Por fin hoy he encontrado un hueco para hacer fotos a un par de cositas "terminadas". Más adelante veréis la razón de las comillas que he puesto en la palabra.

El primero es un álbum con forma, fruto de una tarde cualquiera en las que tenía previstas mil cosas menos hacer el álbum. Esto de improvisar suele tener buenos resultados.

Las fotos van incrustadas entre papel de manera que queda toda la página al mismo nivel.

Este es un detalle de la cuerda de palomar que sirve para unir las páginas. Cada agujero va reforzado también con un adhesivo de refuerzo.

Algunas de las páginas están hechas con acetato transparente, manchado con tintas de alcohol.

En cada página hay algún adorno con su texto, y todas las páginas tienen los bordes entintados.

Esta foto os la he puesto para que le encontréis sentido a la última etiqueta... y para daros un poco de envidia también! ;-)











En algunas páginas he puesto textos con letras grandes en lugar de leyenda.

Y éste es un pequeño invento usando una calcomania, tijeras de formas, una etiqueta y un sello.

La contraportada también es de acetato transparente sellado y manchado con tintas de alcohol.









Y este segundo proyecto será mi álbum de fotos de China, cuando vuelva y tenga fotos, claro está. Por ahora está "terminado"... pero sin fotos.

He usado una colección de papeles de Toga llamada l'or de Bombay, que tienen brillos y dibujos orientales. ¿Orientales? ¿China? Sí... la cosa cuadra...

Para mis álbumes de viajes suelo usar formatos más grandes porque me gusta poner fotos más grandes también. Éste mide 15x28 cm.

He usado tape (japonés), la encuadernación también es japonesa y los papeles de la India... Menudo mejunje para un álbum de China!

Por suerte, los sellitos sí que son letras chinas!!!

He preparado algunas solapas interiores para guardar los mil papeles que me suelo traer de mis viajes. Además, cada página es una mini carpeta donde guardar también más cosas.

He abusado de la purpurina porque tengo la impresión que China y las cosas brillantes se llevan bastante bien.

¿Y vosotras? ¿Algún viaje en mente para este verano?

ScrapIkeando

Hoy os traigo algo de ordenación de scrap. La verdad es que Ikea me saca de más de un aprieto...


Las cajas naranjas son mi nueva adquisición para ordenar los papeles.

Y esta subdivisión para cosas pequeñas es fantástica!!!!

Y por último, un clásico: Una cajonera Fira alterada. Es una lástima que la hayan descatalogado.

Y vosotras, también sois fans de Ikea?

Carpeta de viaje. Paso a paso.

Cada año por estas fechas tomamos la decisión más importante del año: el destino de las vacaciones. Este año nos vamos a dar un paseo por China. Y confieso que lo que más me gusta es montar la carpeta para poder ir guardando los papeles de los vuelos y los hoteles que vamos reservando.

Por si a alguien le apetece la idea, he preparado un paso a paso. Espero que os guste! ;-) A partir de una carpeta roja de solapas, voy a preparar una carpeta con 4 separadores y un par de bolsillos interiores.

 Material básico
-  Carpeta de solapas
- 2 Cartulinas din A3
- 2 Ojetes o 2 brads
- Papel y tape japonés para decorar


1. Marcar los dobles en la carpeta Estas carpetas suelen tener preparados varios dobles diferentes. En mi caso voy a distribuir el espacio de la carpeta dejando la mitad para la zona de solapas y la otra mitad para los separadores que montaré. Este es un detalle de los dobles de la carpeta.

2. Ahora voy a realizar los separadores. Hay que doblar las dos cartulinas, pensando que una irá encajada dentro de la otra, de manera que no están dobladas por la mitad exactamente, sino realizando una pequeña U, de manera que la concavidad de la U mide 0,5 cm en una cartulina y 1 cm en la otra. He decorado los bordes interiores con tape.

Y los bordes exteriores con papel liso, papel decorado y tape.

3. Para enganchar los separadores a la carpeta se hacen un par de agujeros y se unen la carpeta y las cartulinas con ojetes o brads. Cuidado al hacer los agujeros en el lomo de la carpeta, recordad que la mitad de espacio será para la zona de solapas de manera que los agujeros no van en el centro, como me pasó a mí (opción azul) sinó descentrados (opción roja).

4. Para reforzar la unión, he pasado cinta por los agujeros y la he atado con un lazo por fuera.

5. Añadimos un par de detalles decorativos: un listado de cosas a visitar en el interior de la carpeta y unas pestañas decorativas para los separadores hechas con círculos y grapas entintadas.

6. Por último he hecho un par de sobres que me servirán para guardar los innumerables tíquets que siempre traigo de las visitas. Los modelos de sobre los podéis encontrar aquí.

Los sobres están superpuestos y unidos a uno de los separadores con tape (cuidado... es adictivo!)